La comunicación por las redes sociales podría afectar a las habilidades sociales
El avance de las nuevas tecnologías, sobre todo en las sociedad occidentales, está haciendo que, cada día más, los miembros de estas comunidades se vean obligados, en mayor o menor medida, a subirse al carro de la comunicación mediante las redes sociales. El ciudadano se ve inmerso en un mundo en el que la integración social está estrechamente vinculada a un contexto cibernético por el que deberá desenvolverse de forma hábil si su pretensión es relacionarse con los miembros de su entorno.
Es importante reseñar en qué consistía y en qué consiste el concepto de comunidad. Antes de que surgiera este inexplorado cosmos de las redes sociales, la comunidad para una persona no iba más allá de su familia, amigos de trabajo o conocidos del pueblo, calle o edificio. Hoy día este concepto ha cambiado, siendo llevado a un máximo exponente. La comunidad para un usuario de red social supera lo referido, dado que se amplía el contacto relacional a un mayor número de personas traspasando las barreras fronterizas regionales y nacionales, geográficamente hablando.
Esta nueva forma de relacionarnos, ¿ha generado beneficios en la comunicación social entre personas, o son más reseñables los perjuicios que ha ocasionado? Es relevante destacar que el avance de una sociedad, se trate el aspecto que se trate, va a acarrear simpatizantes y detractores en todas direcciones dado que todo progreso lleva consigo el dejar atrás una metodología concreta que en su momento fue considerada la más adecuada y tras el tiempo fue rechaza por no propiciar nuevos retos.
Uno de los aspectos que podría considerarse un beneficio aportado por este novedoso modo de interrelación sería la mayor eficiencia y eficacia en la comunicación. Es decir, logramos establecer una conexión con el mundo de manera más sencilla y adecuada. Esto nos lo encontramos cuando se hace algún tipo de publicación en una red social o, por otra parte, cuando mandamos un mensaje a una persona en concreto. Ante esa situación nos encontramos con un sujeto que, sin mucho esfuerzo ni demasiados recursos, es capaz de transmitir una información usando las palabras adecuadas, dado que tiene la oportunidad de tomarse su tiempo para redactar lo que pretende emitir. Se encuentra en una situación de seguridad personal, lo que en psicología llamamos zona de confort, en la que no se siente presionado a responder, generalmente hablando, ni a hacerlo de una determinada manera. No deja de ser dueño de sus comentarios pero sí deja atrás, en cierto modo, el miedo a errar tras el habla. Se establece así, una comunicación que permite expresar lo que se piensa tal cual se quiere y, no tanto, tal cual se piensa.
¿Esto último podría tener repercusiones en la comunicación social cara a cara? Definitivamente si. Con este tipo de relación social dejamos atrás la espontaneidad, ciñéndonos a un contexto de control verbal en el que tenemos la opción de rectificar eliminando lo mencionado y no dando lugar a tener que disculparnos. No hay nada más humano que errar, ni nada más noble que una disculpa. El pedir perdón es sinónimo en una sociedad de humildad y respeto. Esconderse tras una pantalla de ordenador por miedo a equivocarse es claramente, un atraso en la comunicación social.
Haciendo un añadido a lo mencionado, es de interés resaltar la facilidad con la que una frase puede ser malentendida cuando no hay un cara a cara en el que poder explicarnos con soltura. En dicha frase, el receptor puede intuir significados ocultos o dobles sentidos, llevando ello a una mala interpretación de lo que pretendemos trasmitir. En esas situaciones, que me aventuro a decir son de lo más comunes, el receptor puede sentirse atacado, herido, dañado o ridiculizado y el interlocutor frustrado por no poder expresar lo que verdaderamente quiso decir. Evidentemente, esto también ocurre cuando hablamos con alguien a quien tenemos delante físicamente, y me atrevería a decir que en mayor medida dada la libertad de espontaneidad. Pero en este caso tienes una mayor opción de dejarle clara la verdadera esencia de tu mensaje, ya que el trato es más directo, más personal y por supuesto, más empático.
A modo de anotar una gran ventaja de la comunicación por redes sociales, cabe decir que resulta muy enriquecedor mantener una conversación con una serie de personas, por ejemplo en un blog, sobre un tema concreto, dado que tienes la oportunidad de comunicarte con un mayor número de personas y adquirir una serie de conocimientos y aprendizajes de cada una de ellas. Pero dadas las connotaciones adversas que referimos, dejamos diversos aspectos relacionales en el camino que son imprescindibles para la convivencia social. Uno de estos elementos es la comunicación no verbal, es decir, aquella comunicación que establecemos con las personas de nuestro entorno mediante nuestra forma de comportarnos. Todos aquellos gestos, formas de hablar, entonaciones, manierismos o posturas que mostramos en una conversación cara a cara es imposible transmitirlos y percibirlos mediante un mensaje escrito.
Por otra parte, también habría que destacar el aspecto de la comunicación verbal cara a cara cuando resulta que estamos acostumbrados a relacionarlos vía mensajes por red social. Podría ser muy probable, sin ánimo de generalizar, que dicha comunicación se viera mermada dado que aquí reina lo que hemos dicho que no se daba en una conversación cibernética, como es la espontaneidad y la comunicación no verbal. Estos son componentes clave para una mejor, mayor y correcta fluidez comunicativa en un cara a cara físico, evidentemente sin contar el nivel de instrucción, educación, cultura o habilidad adquirida al respecto. Podríamos enlazar todo esto con la búsqueda de trabajo. Es algo indiscutible que las redes sociales ofrecen una amplia gama de servicios que permiten a sus usuarios ofrecerse como trabajadores, enviar sus currículums o poner a disposición de las empresas que contratan la formación o habilidades personales. Pero, ¿qué pasa cuando nos enfrentamos a una entrevista de trabajo? Este es un contexto de tantos donde impera, se precisa y se podría ver mermada la habilidad comunicativa de la persona.
En definitiva, la comunicación mediante las redes sociales ha sido, es y será un elemento que hace avanzar a la sociedad en una gran diversidad de aspectos, pero un claro componente de desaprendizaje en la comunicación social del tú a tú en la mesa de café o en la entrevista de trabajo. Es importante tener en cuenta los beneficios y perjuicios del progreso para poder avanzar.
¿Crees tú que afecta la comunicación mediante las redes sociales a la comunicación cara a cara?